Hace tiempo que no subo nada
de contenido aquí, así que ruego que me perdonéis. Os quiero contar cómo me
siento actualmente, os quiero contar cómo está construida mi vida.
No os hago esperar más, muchas
gracias por leer. Siempre.
Pienso que vivimos encima de
una plataforma sostenida por distintos pilares. Estos pilares van desde la
familia, los amigos, la pareja,… a la música, el cine, las matemáticas, etc.
Tenemos un problema cuando
esta plataforma está sostenida por un solo pilar. Ya os lo podéis imaginar, a
la que el pilar es derribado o cae, la plataforma le sigue.
Esta semana uno de mis pilares
principales ha desaparecido. Noté cómo la plataforma se inclinaba de una manera
increíble, pero intenté hacer equilibrio para mantenerme arriba y de momento
aquí sigo.
He leído un tuit de una amiga
que definía el propósito de la vida. Me he puesto a pensar toda la tarde sobre
eso, sobre la importancia de estar en esta plataforma, de la importancia de
tener esos pilares; y me he dado cuenta
de que esta plataforma y estos pilares tienen un plastiquito de burbujas
llamado momentos. Y son esos momentos los que hacen fuerte a los pilares y a la
plataforma por la que te mueves.
Yo, por ejemplo, nunca olvidaré
cómo me sentía jugando a Silent Hill 2 con mis colegas de la infancia, nunca
olvidaré lo bien que me sentía junto a mis compañeros mientras veíamos fotos
nuestras haciendo el imbécil, nunca olvidaré cómo la luz de la pantalla del
cine iluminaba la cara de mi compañera de al lado.
No olvidaré estos momentos
porque son los que me hacen fuerte.
Estoy seguro de que muchos
pilares se han caído en mi vida, estoy seguro de que muchísimos estarán por
caer. Quizá solo sean polvo que me entristece al verlo. Quizá vuelvan a sujetar
la plataforma por la que me muevo.
No lo sé.
Lo único que sé es que cuando
los mire sonreiré como nunca, porque realmente me han hecho y me hacen feliz.